Armand Hessels: ¡Aleluya!

En varias ocasiones el gobierno y Quanten como probable operador del inmenso terreno industrial de San Nicolás, dieron a conocer que a mitad del mes de mayo, se anunciaría si logra ejecutar el financiamiento del remplazo ultramoderno y súper limpio de lo que hay ahora. Luego se dijo de mitad de mayo a fin de mayo, finalmente todos entraron en una etapa de silencio, según comentó Armand Hessels de la Fundación Gobierno Corporativo Aruba.

LA ERA DE PIEDRA

En realidad, haber elegido RdA/Gobierno para el proyecto de Quanten es incomprensible, con la polución enorme de tierra en el mar y el aire para la antigua refinería y los inevitables problemas de salud, el resultado de eso es una mera repetición pero a escala menor, igualmente espantosa.

Especialmente en un mundo que por el excesivo uso de crudo como fuente de energía, contamina increíblemente con consecuencias climatológicas serias. El hecho es que la isla turística Aruba quiere aportar conscientemente en esto para mejorar su resiliencia económica mientras tenga otra opción prometedora y limpia. Para seguir manteniendo cueste lo que cueste una industria que está en fase de retiro, eso prueba la falta de sentido de la realidad en  la política de Aruba.

Al igual que la era de piedra no terminó por la falta de piedras, se debe despedir esta actividad industrial que trajo mucha prosperidad, pero afecta al medio ambiente y el bienestar de muchas generaciones del futuro.

CASO CONCLUYENTE

Las perspectivas comerciales para una refinería no son jactanciosas, no es por nada pero muchas empresas de crudo, detuvieron sus actividades, mientras que el uso del crudo seguirá bajando en años venideros. La mayoría de productores grandes de automóviles, anunciaron que el 2030 producirán exclusivamente autos eléctricos, mientras los barcos se transformarán a gas.

Al mismo tiempo, la transformación para el uso de energías alternativas sigue acelerándose, por ejemplo con el uso de energía nuclear;  bajo estas circunstancias, suena ilógico invertir 3,5 billones en un proyecto ultramoderno para una fuente de energía anticuada en una pequeña isla que tiene reducidas sus posibilidades de un mercado propio que es prácticamente cero.

ALTERNATIVA

Es bueno que Quanten no sea la única empresa interesada  en el enorme complejo industrial. Así se dejó saber dentro de un pequeño grupo. Hay una combinación de empresas de alta calidad y financieramente sólidas  que a través de la innovación no solamente pueden sacar a San Nicolás de la frustración, también les pueden aportar trabajo, pueden aumentar considerablemente el producto nacional, incluso se puede sanear el vertedero de Parkietenbos y entregar energía que está produciendo WEB.

 Con todas esas ventajas, parece que RdA/Gobierno está enfocado exclusivamente en las inversiones más altas, que posiblemente puedan brindar ventajas más amplias a los intermediarios. Tradicionalmente hay mucha corrupción en el sector del crudo; de otro lado, posiblemente ese sea el motivo por el que de parte del gobierno tuvieron la iniciativa de entregarle la refinería a un personaje sumamente dudoso.

UNA VEZ MÁS

La Fundación, una vez más, aboga que se involucre a San Nicolás que será el área geográfica más afectada, que  recibirá el impacto de la industria que se instale. El gremio comercial y sindical también debe de participar, todo Aruba debe de aprovechar esto.