En la tarde del lunes las autoridades de salud del país tomaron la decisión de cerrar el consultorio médico de practica general de los doctors Boderie, Giel y Wever. El motivo es que uno de los doctores, específicamente la dr. D. giel, es la tercera paciente de Aruba contagiada con el virus Corona. Junto a su esposo contrajeron el virus durante una vacación en Nueva York. Pero, al parecer, la doctora falló en cumplir con los protocolos existente y ahora puso a sus colegas y todos los pacientes del consultorio en una inconveniencia muy grande.
La doctora, consciente que su esposo estaba enfermo, y después de presentar los síntomas del virus Corona, optó por seguir trabajando sin problema y hasta llevó a su hijo al colegio. Sus colegas se sienten ofendidos de que no siguió el protocolo, ni tomó las medidas de prevención, sabiendo que su esposo tenía los síntomas del virus corona y acababan de llegar de una visita a Nueva York.
El lunes en la tarde se clausuró el consultorio y se ordenó a los demás doctores permanecer en casa bajo cuarentena, al igual que el personal administrativo del consultorio. También se está llamando a los pacientes que visitaron a la doctora durante las últimas semanas para que se hagan la prueba.
Por un lado, es positivo que aún no hay Coronavirus en Aruba, porque los tres casos fueron importados de Nueva York. Sin embargo, que un doctor de casa infectado, la probabilidad que pudo transmitirlo a uno o más de sus pacientes, es grande. Eso lo determinará la investigación y las pruebas.
Cabe señalar que este acto no puede ser visto como un ‘error’ o un simple ‘fallo’. Este de tipo de asuntos aparecen en nuestro Código Penal y hay castigo de cárcel pa quien lo cometa. Tanto la doctora Giel, como su esposo se encuentran en casa en cuarentena.
