El lunes por la mañana, los conductores de la empresa de transporte público Arubus llevaron a cabo un paro de 6:30 a 8:30 am como protesta por sus actuales salarios y condiciones laborales.
Roque Tromp, representante sindical de SEPPA, expresó su descontento, señalando que se reunieron para demostrar su insatisfacción con lo que está sucediendo en Arubus. Salieron durante dos horas para mostrar su descontento.
Los empleados han estado luchando durante varios años por un nuevo aumento salarial y una estructura, indicó Tromp. Desde 2017, han estado en negociaciones sin llegar a un acuerdo satisfactorio con la gerencia. Tromp resaltó que durante la pandemia en 2020/2021, los salarios de los empleados del sector público se redujeron un 12.6%, mientras que otros sectores ya han recibido ajustes salariales, los empleados de Arubus no han visto mejoras.
Cada vez que hay una reunión con el ministro o mediador, nadie se presenta para negociar seriamente. “No tuvimos otra opción que salir a mostrar que queremos una solución justa”, dijo.
Edmundo Marlin de SEPPA enfatizó la insatisfacción de los empleados y subrayó la necesidad de un acuerdo salarial justo. “No podemos seguir con reuniones que se cancelan a último momento. Es crucial que el gobierno, la gerencia de Arubus y el mediador comprendan nuestra urgencia y se sienten para resolver esto de una vez por todas”, afirmó Marlin.
El sindicato y los empleados están dispuestos a tomar acciones más decisivas si no se logra un progreso significativo en las próximas negociaciones. “Estamos aquí para luchar por una nueva y justa estructura salarial para todos los empleados de Arubus”, concluyó Marlin.
