El presidente de Bolivia, Evo Morales, se unió a los bomberos en Santa Rosa el martes (27 de agosto) para ayudar al equipo a apagar incendios forestales, mientras el país lucha por contener las llamas en Bolivia.
Las llamas arden sin cesar a través de vastas extensiones de bosque tropical montañoso y sabana cerca de la frontera de Bolivia con Paraguay y Brasil. Al menos 1 millón de hectáreas, o aproximadamente 3,800 millas cuadradas, han sido afectadas por los incendios, dijeron las autoridades.
A fines de la semana pasada, Bolivia contrató un “Supertanker” Boeing 747 de los Estados Unidos para ayudar con la lucha contra incendios, y ha movilizado a más de 2,000 bomberos, así como pequeños aviones y helicópteros.
Sin embargo, el área afectada por los incendios forestales casi se ha duplicado desde el jueves (22 de agosto).
Miles de incendios forestales también están avanzando a la vecina Amazonía brasileña, la selva tropical más grande del mundo. Las llamas casi se han duplicado este año en comparación con el mismo período en 2018, lo que provocó la indignación mundial.