Ilegal que entro a la isla con granadas de mano declarado en libertad

El viernes la Corte atendió el caso contra un hombre venezolano de nombre Enzo Pirona quien fue acusado de ingresar a la isla de forma ilegal y en posesión de cuatro granadas de mano. En la decisión del Juez, el acusado fue declarado libre de lo que se le acusa. Piron llego a la isla el pasado mes de mayo en uno de dos botes que transportaban a un grupo de venezolanos de forma ilegal.

Piron estuvo a bordo de uno de los botes que entraron por la costa norte de Aruba. Desde el primer día, el acusado negó que haber sido el quien introdujera las armas. Según declaro, lo único que tenía en su poder era su morral azul con un poco de ropa. Ese día, un total de seis personas fueron detenidas; 4 de ellas de la noche a la madrugada, y dos más al día siguiente.


El informe realizado por uno de los agentes policiales indica que vio a un hombre de franela roja correr. El agente le grito: “Pare, pare,” pero el individuo siguió corriendo. Después vio como este sacaba una bolsa negra de su morral y lo aventaba. “No. Yo no vine con granadas. Vine solamente con ropa. Es primera vez que vengo aquí y lo hice por la situación en Venezuela.”


Piron continúo diciéndole al Juez: “Quiero trabajar un poco para ganar dinero y enviarlo a Venezuela.” Reconoce que su morral es de color negro, pero mantiene que el solo llevaba ropa. El fiscal argumento que es imposible que el agente policial se pudiera confundir. Todo sucedió a plena luz del día y Piron era el único vestido con franela roja. También el agente policial lo vio sacar la bolsa y aventarla. Por eso, el fiscal pidió un castigo condicional de 18 meses. El abogado mr. van der Biezen dijo que se debe tener en cuenta que su cliente negó las acusaciones desde el primer instante. Es la palabra de un solo agente policial y es imposible que su cliente, mientras está corriendo, utilizara ambas manos para abrir el morral y sacar la bolsa para tirarla. También presento una foto donde se puede ver que el morral de su cliente ya no tenía su ropa y que las granadas de mano estaban en el morral y no en una bolsa negra. El Juez dio el caso por cerrado y dio a conocer su decisión.

En primer lugar, el Juez indico que las pruebas son suficiente, que están las granadas de manos encontradas. Pero recordó que no solamente deber haber prueba, pero que la Corte debe estar convencida también que la persona acusada fue quien cometió el delito. En este caso el Juez no quedo convencido de la acusación. No entiende porque, con tantos agentes policiales en el sitio, fue solamente uno el que vio al acusado sacar la bolsa y tirarla. Es la palabra de una persona contra la palabra de la otra. Como tal, el Juez lo declaró libre de toda acusación, pero sujeto a deportación.