El miércoles explotó un tanque de oxígeno frente a un empleado en Hadicurari. Al ser transportado al hospital en el día de ayer, ya se sabía que su situación era muy crítica. Inmediatamente los doctores indicaron que sus fracturas eran serias y debía ser enviado al exterior con urgencia. También se estableció que quedaría invalido; ya que la columna vertebral, entre otros, estaban destrozadas.
Mientras se realizaban los preparativos para el traslado a Colombia el jueves, su situación empeoró y cayó en coma. De igual forma se logró llevarlo al país vecino, mientras la familia reunía el dinero para sus documentos. Sin embargo, en la mañana del viernes llegó la noticia que Mario Maduro falleció.
Durante todos estos acontecimientos, el propietario del negocio Palm Beach Divers se lavó las manos de responsabilidad alguna. Tenía a Mario Maduro trabajando sin haberlo registrado. Se distanció de la familia de Mario Maduro y dijo que el no era banco y que no ayudaría. Hasta apagó su teléfono.
En primer instante, la familia le solicitó ayuda para el pasaporte y los documentos que le permitían a la víctima viajar con urgencia. El propietario del negocio de buceo se negó. Ahora que Mario falleció en Colombia, esto también quedará bajo su conciencia.
Mario Maduro era un indigente, pero trabajaba dando una mano a diario en la playa y cerca del lugar de buceo. Recibía una remuneración por su trabajo. A raíz de esto, se pudo saber que, al igual que en Palm Beach Divers, hay mas personas trabajando en los lugares de deportes acuáticos que no son registrados como empleados. Es algo que el SVb y el Departamento de Labor debería investigar y atender.
Condolencias a la familia de Mario Maduro quien perdió su vida de una forma inesperada.
