El pasado viernes, Alexander Moreno fue detenido por agredir al futbolista Valdo Leocadio en un Mall de Playa. Esto ocurrió a las 8am en el Renaissance Mall, donde la víctima estuvo sangrando y el agresor abandonó rápidamente el lugar.
Luego se logró detener al agresor identificado como Alexander Moreno, pero se desconocían las causas de lo ocurrido.
En entrevista exclusiva a 24ora Alexander Moreno afirmó haber atacado al futbolista del Deportivo Nacional Valdo Leocadio, porque el menor hijo de Alexander Moreno le dijo que Valdo lo había tocado indebidamente en sus partes íntimas. El niño le comentó que mientras jugaba Playstation, el jugador del Nacional, le puso su mano sobre la pierna muy cerca de sus partes íntimas; esto habría ocurrido el pasado jueves. Según Moreno al día siguiente (viernes), lo vio y lo atacó, por lo que había hecho Valdo, según lo que le había comentado su niño. “Yo lo ataque y no estoy arrepentido” dijo Alexander Moreno.
Moreno dijo que le enviaron una carta del trabajo diciendo cosas que no son, lo que él manifiesta es que el jugador atacó a su menor hijo, no por ningún caso de celos ni nada de eso, porque la mamá del niño tiene 5 meses saliendo con su pareja, además él tiene otra pareja más de un año y medio. “Yo no lo ataque a traición, yo lo volvería a hacer” dijo Moreno. Según mencionó lo hizo por el honor de su niño y de su familia.
Según Moreno comentó que cuando lo detuvieron, ese día le tomaron su manifestación y lo dejaron libre, le dieron una cita para el 3 de febrero donde resolverán el caso que ya está en investigación. El dijo tener 13 años viviendo en Aruba y nunca tuvo problemas con la Policía. Ahora debido a este inconveniente le prohibieron su ingreso al Renaissance Mall, lamentablemente él trabaja en una de las tiendas ubicadas en el Mall, consecuentemente no podrá trabajar más.
Finalmente el mismo Alexander Moreno hace un llamado a los padres de familia a estar más atentos a sus niños cuidándolos de la pedofilia, invocó a los padres a estar más atentos y siempre estar pendientes de lo que ellos cuentan.
